La promoción del bienestar emocional y la resiliencia es una línea de trabajo prioritaria para la prevención de las alteraciones emocionales y conductuales y los problemas de salud mental en la infancia y la adolescencia.
La resiliencia y el bienestar emocional sientan las bases de un buen ajuste psico-socio-educativo.
Entendemos resiliencia como la capacidad de salir fortalecido ante situaciones vitales complejas o adversas y bienestar emocional como un estado de salud mental que contribuye a que los seres humanos presenten sentimientos de optimismo, confianza, compromiso, felicidad y sensación de satisfacción con uno mismo.
Este proyecto desarrolla actuaciones de diferente tipo orientadas a la dotación de recursos y estrategias personales, grupales, familiares y profesionales. El objetivo es compensar y reducir los posibles factores de riesgo y limitaciones que las dificultades emocionales y conductuales pueden suponer en el funcionamiento, ajuste y adaptación de niños, niñas y adolescentes. Especial atención merecen aquellas personas consideradas como vulnerables por presentar indicadores de desajuste o malestar de tipo emocional.
Todas las acciones se realizan desde una metodología de empoderamiento y participación activa de los asistentes.